Con la goleada de León al Atlas de 3-1, el cuadro esmeralda tiene boleto a la Liguilla y se acerca para estar en la Copa Libertadores, su pase directo dependerá de lo que hagan Tijuana, Toluca y América en sus respectivos juegos.
Sin despeinarse demasiado, los Esmeraldas fueron superiores a los Rojinegros, que pocas pinceladas dieron de sacar un orgullo maltrecho y uno de los peores momentos de Tomás Boy como técnico, ya que no pudo ganar con Atlas desde que tomó las riendas del equipo, es decir, once duelos sin saborear un triunfo.
Atlas en los primeros minutos del juego quiso sacudirse la modorra de todo el torneo y asustar a su rival, pero sus embates fueron más con inercia que con ganas de hacer daño.
Héctor Mancilla pudo abrir el marcador a favor de los Zorros, pero salió del vestidor desconectado, cuando tenía todo para fusilar el marco Esmeralda, se enredó con la pelota y terminó por entregarla a la defensa del cuadro leonés.
Sin embargo, al 14', los locales pusieron orden. En un centro lleno de peligro, el balón llegó al manchón penal, y Eisner Loboa con decisión se adelantó a la marca de Hugo Rodríguez y mandó la pelota al fondo de las redes para hacer explotar el abarrotado Estadio Nou Camp.
Los Rojinegros trataron de reaccionar, pero no había conexión alguna, mientras que los dirigidos por Gustavo Matosas, se mostraban ordenados y respetando un estilo de juego.
Al 33', León tuvo un tiro de esquina a favor, la zaga de Atlas se distrajo y dejó sin marca a Matías Britos, quien con un remate de cabeza picado venció al portero Miguel Pinto para poner el 2-0.
Mientras en León todo era armonía, su rival, Atlas, estaba consumido por la presión. El técnico atlista, Tomás Boy decidió sacar antes de que terminara el primer tiempo a Gregorio Torres, el jugador salió molesto y encaró a su estratega al pasar cerca de él. Pero eso no era todo, al concluir la primera mitad, el Capitán de los Rojinegros, Leandro Cufré mandó llamar a sus compañeros, pero Héctor Mancilla en dos ocasiones les hizo dos recortes de manga y se fue al vestidor.
Para la segunda parte, León salió con su misma intensidad, los Rojinegros de manera discreta querían sacar un orgullo, que ya su afición no le cree a ninguno o a la mayoría de los jugadores.
Los Esmeraldas le dieron mayor tranquilidad al juego al 59', cuando Rodríguez derriba en el área a Loboa, el árbitro central, Roberto García Orozco decretó la pena máxima. Sebastián Maz pidió el balón y desde los once pasos ejecutó de manera perfecta para vencer a Pinto, quien prácticamente ni se movió. Al 60' el marcador indicaba 3-0 a favor del cuadro leonés.
Al verse arriba en el marcador sin muchos apuros, los Esmeraldas aflojaron en su juego, situación que fue aprovechada por Atlas y al 76', Héctor Mancilla puso el 3-1.
Sin embargo, la reacción de los Rojinegros ya no les alcanzó para más y salieron del Nou Camp con una derrota más, mientras que León, con autoridad demostró el por qué está en Liguilla y en la pelea por entrar de manera directa a la Copa Libertadores.
